Malinalco: Un rinconcito muy mexicano.
06.05.2015 15:08
Un pequeño pueblo llamado Malinalco, cuenta con un clima cálido, días soleados y cielos azules, lo que lo convierte en el destino perfecto para aquellos que desean escapar un fin de semana del ajetreo de la ciudad.
Se ubica en la parte sur del Estado de México a 1,750 metros sobre el nivel del mar y tiene sus puertas abiertas durante todo el año para los turistas que no deseen conducir largas distancias, ya que se encuentra a 98 km de la Ciudad de México, el viaje en carretera resulta ser muy relajante por los verdes paisajes que ofrece el camino, por lo que basta con despejar la mente, colocar tu música favorita y comenzar a disfrutar desde ese momento el futuro encuentro con Malinalco.
Las personas que gustan de los lugares con magia, historia, colorido y el sonido del agua corriendo se sentirán como en casa, en el lugar se ofrecen un sinfín de actividades culturales y extremas para todos; desde visitar museos, pescar truchas en el andador gastronómico hasta escalar por la antigua zona arqueológica de la cual muy pocos tienen conocimiento.
Algunas de sus celebraciones más importantes, son las fiestas de cada barrio al Divino Salvador, durante el mes de agosto, en donde el intercambio cultura resulta ser sumamente enriquecedor; así mismo, las festividades por Semana Santa son una gran opción para pasar esta temporada familiar.
El trato por parte de los habitantes del pueblo es excelente, ya que se encuentran en todo momento al servicio de los visitantes para ofrecerles una experiencia inolvidable y placentera.
Recomendamos probar los deliciosos helado de la local Mallinali, cuentan con una gran variedad de sabores que atenderán las exigencias de cualquier paladar, sin mencionar los económicos precios que manejan en la heladería; así como la tradicional pesca de tu propia trucha, la cual te es cocinada al momento de la manera que tu lo desees (a la plancha, al mojo de ajo, con queso, etcétera.)
Todos merecemos un “escape” de vez en cuando, por lo que Malinalco resulta ser una gran opción, no es necesario gastar miles de pesos para poder disfrutar de un regalo natural y cultural como el que ofrece este pequeño pueblo, así que, ¡toma tu maleta y visita este rincón de México!, no te arrepentirás.